
Hispania, una nueva entidad política
Hispania, la provincia romana
El topónimo latino «Hispania» era el nombre que los romanos daban a la península ibérica y territorios asociados. El nombre de Hispania significa “Tierra de conejos” ya que, en la exploración romana por la península ibérica, encontraron gran variedad de conejos por la zona. Hispania fue el nombre dado por los romanos a la península ibérica y parte de la nomenclatura oficial de las tres provincias romanas que crearon allí: Hispania Ulterior Baetica, Hispania Citerior Tarraconensis e Hispania Ulterior Lusitania. Otras provincias formadas posteriormente, fueron Carthaginensis y Gallaecia.
La Hispania romana
Se conoce como Hispania Romana a los territorios de la Península Ibérica durante el período histórico de dominación romana. En los últimos años del imperio romano, supusieron su desgaje en estados romanos enfrentados entre sí constantemente. En Hispania, Maximus se proclamó emperador de Hispania, independizándola de Rávena (formando el Imperio Hispanorromano); con su muerte el imperio hispano no desapareció, pasó a manos del rey de Tolosa Eurico. Y con el tiempo, se comenzó a utilizar una forma secundaria de Hispania: Spania y de ahí se derivaría el nombre que conocemos hoy como España.
